Graciela Geller - Argentina
La familia bien gracias.
sigue sus huellas
huele su olor por las veredas
contrata ojos suplementarios
pacta con dios y con el diablo
gasta su antorcha en extramuros
nada ahorra para sus profundas entretelas
espejo dieta vestidos
pinta sus lágrimas con el exacto color de esta temporada
y aguarda aguarda a que él le diga
pero él no dice
¡es que está tan ocupado!
en sus trabajos en sus dineros en su automóvil
y en apuntar las brújulas hacia su propio ombligo
por sobre todo
por sobre ella
por sobre todas
-¿y la familia?
ay mujerque grita su orgasmo de rutina
muy cuidadosa ya que sus niños pared por medio
eso sí: no tan seguido
salteando meses
cuando Rutina manda que sea usada como una esposa
ah mujer
devota y enemiga
tan feliz cuando en el pino de diciembre él le cuelga esa mirada
como cuando lo descubre en falta
porque sólo así puede
porque así impone y exige y quiebra
y le confía a las amigas
que por fin lo ha apresado de los testículos (en lunfardo)
-bien gracias
así las cosas espera el climax
y en medio del loco instante
le pregunta si aún la quiere
y él que sí claro
que como el primer día
Estos son los amores que le contaba.
Amores de los dientes para afuera.
Amores para toda la vida.
© de los herederos de la autora
sigue sus huellas
huele su olor por las veredas
contrata ojos suplementarios
pacta con dios y con el diablo
gasta su antorcha en extramuros
nada ahorra para sus profundas entretelas
espejo dieta vestidos
pinta sus lágrimas con el exacto color de esta temporada
y aguarda aguarda a que él le diga
pero él no dice
¡es que está tan ocupado!
en sus trabajos en sus dineros en su automóvil
y en apuntar las brújulas hacia su propio ombligo
por sobre todo
por sobre ella
por sobre todas
-¿y la familia?
ay mujerque grita su orgasmo de rutina
muy cuidadosa ya que sus niños pared por medio
eso sí: no tan seguido
salteando meses
cuando Rutina manda que sea usada como una esposa
ah mujer
devota y enemiga
tan feliz cuando en el pino de diciembre él le cuelga esa mirada
como cuando lo descubre en falta
porque sólo así puede
porque así impone y exige y quiebra
y le confía a las amigas
que por fin lo ha apresado de los testículos (en lunfardo)
-bien gracias
así las cosas espera el climax
y en medio del loco instante
le pregunta si aún la quiere
y él que sí claro
que como el primer día
Estos son los amores que le contaba.
Amores de los dientes para afuera.
Amores para toda la vida.
© de los herederos de la autora
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